Agentes federales luchan contra la minería ilegal en la región del río Tapajós en el estado de Pará-Brasil. Además de la degradación de los bosques, los cursos de agua están amenazados. "El río Tapajós recibe muchos sedimentos. El agua se vuelve mucho más turbia. Cuanta más maquinaria pesada se utiliza en los frentes mineros, más sedimentos se vierten en los ríos y en todos los cuerpos de agua. Y también hay contaminación, principalmente por mercurio. La región en sí está muy degradada y no hay especies que vuelvan a vivir allí", afirmó Tatiana Leite, coordinadora del Instituto Chico Mendes para la Conservación de la Biodiversidad - ICMBio.
Fuente: Agencia Amazon