Pescadores que trabajan en el río Solimões, cerca del municipio de Tabatinga, en la región de la triple frontera Brasil-Colombia-Perú, avistaron los artefactos.
Para su sorpresa, eran dos cañones que tenían su origen en la corona portuguesa.
Una de las piezas fue enterrada en una playa que apareció con la marea baja del río Solimões.
El otro tenía parte del artefacto fuera del agua.
Cada cañón puede pesar más de dos toneladas.
El hallazgo arqueológico sólo fue posible debido a la grave sequía que azota el río Solimões en Amazonas.
Según el Servicio Geológico Brasileño, esta es la peor sequía en 42 años en el municipio de Tabatinga.
Los dos cañones fueron encontrados frente al paseo marítimo de la ciudad, a unos 200 metros de las ruinas del Fuerte São Francisco Xavier de Tabatinga.
Las piezas de artillería fueron instaladas para ayudar a las tropas a defender los dominios de la Corona portuguesa contra las expediciones españolas en la región.
Existen registros de viajeros del siglo XVIII que relatan la presencia de los cañones en el Fuerte Portugués.
El edificio militar fue destruido en 1932 por el derrumbe del barranco sobre el que estaba construido.
Se trata de un fenómeno conocido como ‘Tierras Caídas’, muy común en los ríos de la Amazonia.
En los años siguientes, el Fuerte quedó cubierto por las aguas del río Solimões.
Fuente: Agencia Amazon