Denuncias de mala atención, falta de insumos y alto índice de muertes infantiles son parte de la rutina en el Hospital Materno Infantil Nossa Senhora de Nazareth, que según el Ministerio Público registró el año pasado 17 muertes por cada mil nacimientos. Se trata de un aumento del 70 por ciento respecto al año anterior, mientras que el promedio nacional es de 12 muertes por cada 1.000 nacimientos. En junio de 2021, el gobierno de Roraima cerró la maternidad para realizar obras de renovación y ampliación del edificio y transfirió los servicios a instalaciones temporales. Estaba previsto que las obras duraran seis meses, pero su finalización se retrasó. Por eso el Estado ha prorrogado en repetidas ocasiones el contrato de alquiler de la maternidad de lona, que cuesta un millón doscientos mil reales de las arcas públicas. El hospital de maternidad también atiende a población indígena, refugiados de Venezuela e inmigrantes de Guyana, así como a pacientes críticos de hospitales privados que no cuentan con unidad neonatal. El Ministerio Público exige al gobierno de Roraima ampliar el servicio y construir otra maternidad. El secretario de salud estatal informa que en marzo la maternidad será entregada a la población.

Fuente: Agencia Amazon