Los habitantes de Catalão han construido una presa improvisada para retener parte del agua de un afluente del río Solimões y así mantener a flote sus casas. La comunidad está en el municipio de Iranduba, en la región metropolitana de Manaus. La sequía de este año es tan severa que los habitantes de las riberas tienen que caminar hasta donde el río está seco para conseguir agua potable. Los habitantes de las riberas también están yendo a buscar agua de baja calidad en baldes pequeños y grandes para otras tareas de una fuente improvisada. Según la Defensa Civil del estado, cuarenta y dos municipios están en estado de emergencia debido a la sequía que afecta a la región amazónica.
Fuente: Agencia Amazon