Los datos del Departamento de Salud de Acre (Sesacre) muestran que sólo en los primeros tres meses de este año se confirmaron 1.042 casos de malaria en diez ciudades. En el mismo periodo de 2023, el número de casos positivos llegó a 1.583. La reducción entre los periodos evaluados fue de 34,1%. La encuesta fue publicada este jueves (25), Día Mundial de la Malaria. La malaria es causada por un protozoo transmitido por la picadura de la hembra del mosquito Anopheles, que se infecta cuando pica a una persona enferma. El diagnóstico se puede realizar mediante una muestra de sangre o una prueba rápida. La enfermedad tiene cura, ya que el tratamiento es eficaz, sencillo y gratuito. Sin embargo, si no se diagnostica y trata de manera oportuna y adecuada, puede progresar a formas graves. De ahí la importancia de que cualquier persona que haya viajado en los últimos 15 días a una zona endémica de malaria busque inmediatamente servicios de salud tan pronto como experimente cualquiera de estos síntomas. La División de Vigilancia de la Salud Ambiental de la Sesacre destacó en su informe que los casos registrados en Acre en 2023 representan casi el 4% del total de registros en la región amazónica. La mayoría de los casos de malaria se concentran en la Región Amazónica: Acre, Amapá, Amazonas, Maranhão, Mato Grosso, Pará, Rondônia, Roraima y Tocantins. Otras regiones del país tienen pocos reportes, pero no se puede descuidar la enfermedad por su alta letalidad. En general, después de confirmar el diagnóstico de malaria, el paciente recibe tratamiento de forma ambulatoria, con medicamentos que se proporcionan de forma gratuita en las unidades del SUS. Sólo los casos graves deben ser hospitalizados inmediatamente.
Fuente: Agencia Amazon