En el malecón de la localidad del interior del estado de Amazonas, ochocientas familias viven en casas flotantes a lo largo de siete kilómetros de los ríos Purús e Ipixuna. Tapauá tiene sólo sesenta y ocho años y desde su fundación sus habitantes, en su mayoría pescadores, viven sobre el agua. Ahora hay gasolineras, tiendas e incluso un banco exprés para comodidad de todos. Un molino harinero se ha convertido en una oportunidad de trabajo e ingresos para una familia que vende productos locales. La limpieza de los ríos es importante, por eso se organizan campañas de sensibilización. Los residentes locales recogen los residuos diariamente.
Fuente Agencia Amazon